El ser humano es un ser consciente y racional que debe luchas a cada momento por guardar el equilibrio emocional para que su salud no se vea afectada.
Las emociones benefician o perjudican el ser, por lo tanto debemos cultivar aquellas que nos ayudan a estar sanos y evitar aquellas que nos afectan.
La mayoría de las enfermedades que afectan la salud provienen de aquellas emociones perjudiciales, entre las cuales se destacan la ira, el temor, la tristeza, el odio; pero así como hay malas emociones que pueden enfermarnos, también hay emociones sanas que pueden ser benéficas para nuestra salud, como lo son la alegría, el amor y la risa.
Cuando alguna emoción perjudicial nos invade, debemos aceptarla para poder canalizarla y transformarla desde el corazón a la cabeza.
Si permitimos que las emociones negativas nos controlen, entonces estas se vuelven hacía nosotros, afectando nuestra salud, pero si por el contrario sabemos enfrentarlas y controlarlas, entonces se tornan a nuestro favor llevándonos a ser personas más felices y saludables.
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